jueves, 8 de noviembre de 2012

El Hospital, Sanidad y el Alcalde de Ontinyent


En los últimos estertores de la primera burbuja, la financiera, el gobierno de la Generalitat, através de la Consellería de Sanidad, incluyó la construcción de un Hospital para Ontinyent. El dinero entraba fácil a las arcas valencianas, procedente de nuestros impuestos, y electoralmente le convenía a su gobierno, cosa que aprovechó muy bién la alcaldesa Insa para su partido. Sin terrenos ni maquetas, improvisaron lo que pudieron para dar toques de realidad a un proyecto aún en la imaginación de sus preceptores.

El fracaso de aquélla iniciativa no produjo otro mal a los ontinyentins que los 30.000 euros que se llevó el poste anunciador de la ubicación del edificio hospitalario,sin embargo la oposición socilista supo llevar el caso contra los intereses del PP en la alcaldía y le sacó su fruto, puesto que de aquella presión empezó a lograr un esquisito zumo para sus intereses electorales y supo dejar a Lina Insa en afamada precariedad.

En plena burbuja política, hace unos dias la Conselleria de Sanidad ha anunciado que retiren del cobro el importe de la licencia municipal del Hospital -creo recordar que era de 800.000 euros- porque no habrá edificio hasta 2015, siendo muy optimistas. Y ahí es donde le duele al actual gobierno municipal. 

Si los presupuestos de 2012 incluyen el ingreso de la licencia y no la podemos cobrar significa que si se quiere cumplir con el presupuesto municipal, el ayuntamiento tiene que dejar de gastar partidas por el valor de la licencia y eso les supone un plus difícil de cumplir a estas alturas del año. Lo cual quiere decir que la única manera de dar salida a la burbuja creada en el ayuntamiento por las decisiones políticas equivocadas es con medidas austeras, ahorrando y no gastando.

Claro, la izquierda en masa a puesto el grito en el cielo para dejar constancia que la exclusión del hospital es responsabilidad de la derecha de Valencia, tiene razón, pero porque el gobierno valenciano está siendo un poquito menos derrochador que el del expresident Camps, pero solo un poquito, igual que el de la izquierda ontinyentina en relación al ayuntamiento del PP de Insa. No obstante, el alcalde Rodríguez de Ontinyent sigue enviando cartas para librar responsabilidad de este desaguisado.

El meollo de todo el problema me temo que no es la falta de plazas hospitalarias ni el desplazamiento a Xátiva de pacientes, sino la pérdida de 800.000 euros, el 3,2 % de los ingresos de un presupuesto municipal mal ajustado y peor ejecutado.

El final de la película es conocido: más deuda municipal que nadie va a remediar que los paganos seamos Vd y un servidor.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Como siempre, parte de una premisa falsa para articular un discurso inevitablemente falso. Sólo con haber revisado los presuouestos de 2012, habría notado que no existe ningún ingreso previsto por la licencia del hospital. Si su fobia a la izquierda no le hubiera cegado, habría reconocido que eso es lo que sí hizo Insa para cuadrar a machamartilll el presupuesto de 2011. Por cierto, esas cuentas incluían una trampa mayod: preveían el ingreso de una ayuda de la Generalitat (cómo no), previamente anulada. Antes de hablar con esa contundencia, información.

Mime dijo...

La premisa no es falsa ,puesto que está condicionada al cobro de la licencia. Si no está incluida en los presupuestos, el gobierno no tendrá que hacer el esfuerzo que destaco.
El PP recibió el castigo en las urnas, ya comenté sobre su infierno en la oposición merecida.
Si las fobias son razonadas, bienvenidas sean, pero vd confunde crítica con rechazo.
Gracias por su aportación.

Anónimo dijo...

Oiga, insisto, no es de recibo escribir un artículo y hacer unas acusaciones sostenidas por una premisa falsa. Desaparecido el condicional, no hay caso.
Dice: "El meollo de todo el problema me temo que no es la falta de plazas hospitalarias ni el desplazamiento a Xátiva de pacientes, sino la pérdida de 800.000 euros, el 3,2 % de los ingresos de un presupuesto municipal mal ajustado y peor ejecutado". No hay pérdida, no hay presupuesto mal ajustado ni peor ejecutado... Ni más deuda. Señor Mime, disculpas y a otra cosa.