viernes, 23 de abril de 2010

Humo, tabaco y cenizos

Odiarás a los ministros y al poder con todas tus fuerzas y al prójimo como a tí mismo.

¡Qué bién estan los ministros cuando callan!
1.- La ministra Salgado cuando ejercía el Ministerio de Sanidad obligó a crear espacios sin humo en locales públicos con más de 100 metros de superficie.
2.- La misma ministra de la cosa prohibió la venta de tabaco en bares y locales de ocio.
3.- Otra ministra de la misma cosa, Trinidad Jiménez, levantó la prohibición anterior autorizando la venta en máquinas expendedoras.
4.- Esta misma ministra tiene previsto autorizar la venta de tabaco en lugares donde se prohibe su venta siempre que no haya algún otro negocio que no venda.
Estos cuatro mandamientos se encierran en dos:
Odiarás a los ministros y al poder con todas tus fuerzas y al prójimo como a tí mismo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es verdad. Estoy harto de que me digan lo que tengo o puedo hacer. Si mi humo molesta en un bar o en una cafetería, pues el que esté a mi lado que se retire un poco, que tampoco pasa nada. A ver si no vamos a poner fumarnos un pitilo donde nos parezca. El humo del tabaco tampoco es tan perjudicial. También lo es la polución y por eso no cierran fábricas o dejan de circular los coches. Decidme prehistórico, pero estoy convencido de que muchos piensan lo mismo y no lo dicen.