lo que está demandando es más intervencionismo, más gasto, mayor protección y más estado del bienestar
Toda vez que ha pasado un mes largo desde la toma de la Puerta del Sol por el movimiento 15-M, el primigenio antes de la intoxicación por otros movimientos aprovechados, quisiera dejar mi punto de vista crítico.
En busca de información a través de la red, he encontrado
esta página del movimiento 15M que me ha proporcionado una visión que hasta ahora era interesada, según el medio de donde partía.
La constante
"preocupados e indignados" es común en toda persona mínimamente informada, del movimiento y fuera de él, por tanto no aporta novedad al grupo. Tienen mucho interés en definirse como iguales a todos los demás para desclasificarlos como okupas, kaleborroca, etc, o sea, que están dentro de los parámetros del grupo legal. Nada que añadir por mi parte.
Por la corrupción de los políticos, empresarios, banqueros… Por la indefensión del ciudadano de a pie. La corrupción de empresarios y banqueros debe cortarla el consejo de administración correspondiente y la ley si afecta a terceros. La perversión política si que nos afecta a todos y debe ser decapitada, porque se inicia con nuestro dinero que coactivamente nos usurpa el Estado. La sensación de indefensión es debida a la dificultad que encontramos para iniciar un proceso contra la administración del Estado y a su lentitud, además de que siempre nos toca pagar las costas, aunque ganemos.
Las prioridades de toda sociedad avanzada han de ser la igualdad, el progreso, la solidaridad, el libre acceso a la cultura, la sostenibilidad ecológica y el desarrollo, el bienestar y la felicidad de las personas. El párrafo lleva el tufo de la imposición. Las prioridades son individuales y cada uno elige las que le convienen. Mal empezamos.
Existen unos derechos básicos que deberían estar cubiertos en estas sociedades: vivienda, trabajo, educación, etc. Los derechos básicos en la sociedad occidental son los derechos humanos que son los que el Estado debe garantizar: Vida, seguridad, propiedad, libertad y contrato. El 15M no se acuerda de ellos.
El actual funcionamiento de nuestro sistema económico y gubernamental no atiende a estas prioridades y es un obstáculo para el progreso de la humanidad. El sistema económico es el basado en el libre mercado, el capitalista. El otro es el socialista, totalitario, el que secuestra los derehos humanos para el fin que el estado persigue: Corea del Norte, Cuba, Zimbabwe, Eritrea, etc.
Comparto el punto sobre la participación política. Son necesarios referendums sobre cuestiones fundamentales y el parlamento debe impulsar y admitir proposiciones que llegan apoyadas por más de 500.000 firmas.
El obsoleto y antinatural modelo económico vigente bloquea la maquinaria social... Otra vez el modelo económico. Sin duda prefieren el modelo socialista e intervencionista de paises desaparecidos (URSS) que es el mismo de los paises actuales que encabezan la pobreza.
La voluntad y fin del sistema es la acumulación de dinero, primándola por encima de la eficacia y el bienestar de la sociedad. El bienestar es individual, cada cual conforma el suyo. Se necesita dinero para alcanzarlo. Después, unos amplian su felicidad, otros prefieren ahorrar las ganancias y algunos las invierten en bienes.
Es necesaria una Revolución Ética. Hemos puesto el dinero por encima del Ser Humano y tenemos que ponerlo a nuestro servicio. Somos personas, no productos del mercado. Las revoluciones se justifican cuando participan todos contra la abolición de los derechos humanos fundamentales. Es bonita la palabra Ëtica, pero no añade nada a la Revolución. Aquí nadie ha puesto el dinero por encima del hombre, nosotros no somos el medio para los otros y existen toda una letanía de leyes penales contra quienes usurpan nuestros Derechos. Sólamente el estado totalitario tiene secuestrado al hombre para usarlo como mercancía.
Básicamente no comulgo con las ideas del 15M. En ningún momento he citado la violencia como impulsora del movimiento, siempre lo he entendido como cívico y pacífico. Pero lo que está demandando es más intervencionismo, más gasto, mayor protección y más estado del bienestar, que son la estructura que conforma el modelo de Estado que ha propiciado el desastre económico que nos invade.