Feria Gastronómica

No me gustó la columna que Santiago Sanchis escribió en El Periodic de Ontinyent hace 3-4 semanas, Stopers se titulaba. Hacía referencia a las personas que hablan o comentan con visión pesimista una situación dada, por ejemplo la economía española. Me sentí desposeido de mis ideas al leer su análisis despectivo de los que nos aventuramos a la crítica razonada y fundada. Una sensación similar tuve cuando el gran ZP nos decía a los españoles que aquí no había crisis, que los pesimistas eran unos agoreros antipatriotas. El poco tiempo transcurrido ha demostrado que el único cenizo fué el Presidente.
Se celebra en Ontinyent, hoy domingo acaba, la 12ª Feria Gastronómica. Está organizada y patrocinada por la Macomunidad de la Vall d'Albaida, organismo público, y Ahval, los hosteleros de Coeval, organismo parapúblico o próximo a lo público. Estas ferias gastronómicas tienen el éxito de asistencia asegurado, pues de entrada gratuita -es evento callejero- por módico precio tomas buenas tapas y vinos mientras paseas con amigas y amigos.
En otros aspectos es un fracaso:
1) De los trece expositores privados, sólamente cuatro eran de Ontinyent, aunque la mayoría eran de la Vall.
2) La Feria es deficitaria para la Mancomunidad, porque la cuantía que desembolsa no la reintegra, o sea, como cualquier iniciativa pública, pagan unos y la disfrutan otros.
3) Otros cinco stands pertenecían a otras organizaciones públicas para su promoción. Más déficit.
4) La misión de los expositores privados es dar a conocer sus productos y venderlos. Pués bién, desde las primeras ediciones de la exposición, en la entrada al recinto ferial, donde hubo entre 40 y 50 entidades privadas a hoy, media una crisis económica, es cierto, pero algo más está sucediendo, porque mientras una empresa expone y vende no tiene motivo para retirarse el siguiente año. Cuatro ubicaciones distintas no dan la clave para el éxito. Las cuatro ubicaciones han sido exitosas en asistencia. No así el número de expositores.
Se deja ver un futuro dirigido a las asociaciones gastronómicas gremiales: hosteleros, carniceros, panaderos, pasteleros, etc. Pero la estructura actual de la FG no da para más, me temo.